LA VASIJA CON RAJADURAS

Cuenta la leyenda india que un hombre transportaba agua todos los días a su aldea usando dos grandes vasijas, sujetas en las extremidades de un pedazo de madera que colocaba atravesado sobre sus espaldas.
Una de las vasijas era más vieja que la otra, y tenía pequeñas rajaduras; cada vez que el hombre recorría el camino hasta su casa, la mitad del agua se perdía.
Durante dos años el hombre hizo el mismo trayecto. La vasija más joven estaba siempre muy orgullosa de su desempeño, y tenía la seguridad de que estaba a la altura de la misión para la cual había sido creada, mientras que la otra se moría de vergüenza por cumplir apenas la mitad de su tarea, aun sabiendo que aquellas rajaduras eran el fruto de mucho tiempo de trabajo.
Estaba tan avergonzada que un día, mientras el hombre se preparaba para sacar agua del pozo, decidió hablar con él:
-Quiero pedirte disculpas ya que, debido a mi largo uso, sólo consigues entregar la mitad de mi carga, y saciar la mitad de la sed que espera en tu casa.
El hombre sonrió y le dijo:
-Cuando regresemos, por favor observa cuidadosamente el camino.
Así lo hizo. Y la vasija notó que, por el lado donde ella iba, crecían muchas flores y plantas.
-¿Ves como la naturaleza es más bella en el lado que tú recorres? –comentó el hombre-. Siempre supe que tú tenías rajaduras, y resolví aprovechar este hecho. Sembré hortalizas, flores y legumbres, y tú las has regado siempre. Ya recogí muchas rosas para adornar mi casa, alimenté a mis hijos con lechuga, col y cebollas. Si tú no fueras como eres, ¿cómo podría haberlo hecho?

¿Zanahoria, huevo o café?

Una hija se quejaba con su padre acerca de su vida y lo difíciles que le resultaban las cosas. No sabía cómo hacer para seguir adelante y creía que se daría por vencida. Estaba cansada de luchar. Parecía que cuando solucionaba un problema, aparecía otro.
Su padre, un chef de cocina, la llevó a su lugar de trabajo. Allí llenó tres ollas con agua y las colocó sobre fuego fuerte. Pronto el agua de las tres ollas estaba hirviendo. En una colocó zanahorias, en otra colocó huevos y en la última colocó granos de café. Las dejó hervir sin decir palabra.
La hija esperó impacientemente, preguntándose qué estaría haciendo su padre. A los veinte minutos el padre apagó el fuego. Sacó las zanahorias y las colocó en un tazón. Sacó los huevos y los colocó en otro plato. Finalmente, coló el café y lo puso en un tercer recipiente. Mirando a su hija le dijo:
- "Querida, ¿qué ves?"
-"Zanahorias, huevos y café" fue su respuesta.
La hizo acercarse y le pidió que tocara las zanahorias. Ella lo hizo y notó que estaban blandas. Luego le pidió que tomara un huevo y lo rompiera. Luego de sacarle la cáscara, observó el huevo duro. Luego le pidió que probara el café. Ella sonrió mientras disfrutaba de su rico aroma. Humildemente la hija preguntó:
"¿Qué significa ésto, padre?"
El le explicó que los tres elementos habían enfrentado la misma adversidad: agua hirviendo, pero habían reaccionado en forma diferente. La zanahoria llegó al agua fuerte, dura; pero después de pasar por el agua hirviendo se había vuelto débil, fácil de deshacer. El huevo había llegado al agua frágil, su cáscara fina protegía su interior líquido; pero después de estar en agua hirviendo, su interior se había endurecido. Los granos de café sin embargo eran únicos; después de estar en agua hirviendo, habían cambiado al agua.
"- ¿Cuál eres tú?", le preguntó a su hija. "Cuando la adversidad llama a tu puerta, ¿cómo respondes? ¿Eres una zanahoria que parece fuerte pero que cuando la adversidad y el dolor te tocan, te vuelves débil y pierdes tu fortaleza? ¿Eres un huevo, que comienza con un corazón maleable? ¿Poseías un espíritu fluido, pero después de una muerte, una separación, o un despido te has vuelto duro y rígido? Por fuera te ves igual, pero ¿eres amargado y áspero, con un espíritu y un corazón endurecido?
¿O eres como un grano de café? El café cambia al agua hirviente, el elemento que le causa dolor. Cuando el agua llega al punto de ebullición el café alcanza su mejor sabor. Si eres como el grano de café, cuando las cosas se ponen peor tú reaccionas mejor y haces que las cosas a tu alrededor mejoren.

LAS TRES REJAS

Un joven discípulo de un filósofo sabio llega a casa de éste y le dice:
-Escucha, maestro. Un amigo tuyo estuvo hablando de ti con malevolencia...
-¡Espera! –lo interrumpe el filósofo- ¿Ya hiciste pasar por las tres rejas lo que vas a contarme?
-¿Las tres rejas?
-Sí. La primera es la verdad. ¿Estás seguro de que lo que quieres decirme es absolutamente cierto?
-No. Lo oí comentar a unos vecinos.
-Al menos lo habrás hecho pasar por la segunda reja, que es la bondad. Eso que deseas decirme ¿es bueno para alguién?
-No, en realidad, no. Al contrario...
-¡Ah, vaya! La última reja es la necesidad. ¿Es necesario hacerme saber eso que tanto te inquieta?
-A decir verdad, no.
-Entonces –dijo el sabio sonriendo- si no es verdadero, ni bueno, ni necesario, sepultémoslo en el olvido.
Escucha,
Nunca sabes si dirán las palabras justas que estabas esperando.
Abre,
Nunca sabes si será la persona que siempre soñaste.
Despierta,
Nunca sabes si ese día cambiará el resto de tu vida.
Habla,
Nunca sabes si tus palabras despertarán sentimientos en personas insospechadas.
Cambia,
Nunca sabes si el nuevo camino te traerá nuevas alegrías.
Analiza,
Nunca sabes si la situación que te acongoja, está disfrazada de oportunidad.
Arriesga,
Nunca sabes si tus movimientos audaces, serán el comienzo de una cadena de éxitos notables.
Camina,
Nunca sabes si tus huellas, serán el camino que sigan aquellos que confían en ti.


Cosejos para vivir feliZ...


Aprovecha al máximo cada hora, cada día y cada época de la vida
Así podrás mirar al futuro con confianza y al pasado sin tristeza
Sé tú mismo, pero sé lo mejor de ti mismo
Ten valor para ser diferente y seguir tú propia estrella
Y no tengas miedo de ser feliz
Goza de lo bello
Ama con toda el alma y el corazón
Cree que aman, aquellas personas que tú amas
Olvídate de lo que hayas hecho por tus amigos y recuerda, lo que ellos han hecho por ti
No repares en lo que el mundo te debe y fíjate en lo que le debes al mundo
Cuando te enfrentes a una decisión, tómala tan sabiamente como te sea posible
Luego olvídala... el momento de la certeza absoluta nunca llega...

Sobre todo recuerda:
Actúa como si todo dependiera de ti, y Vive cada día en plenitud.~

nO siempre...

n0 siempre lo que necesito, es lo que quier0
lo que quierO, no siempre es lo que encuentro,
lo que encuentro, nO Siempre es lo que busco,
lo que busco, no siempre es lo acertado
y lo acertado n0 siempre me hace feliz…

Porque lo atractivo, no siempre es más bello…
Quizá porque… no siempre dormir significa que descanses,
porque podemOs soñar despiertos,
porque una mirada dice mas que mil palabras vacias,
porque los silencios duelen más que las palabras,
porque se puede andar perdidO… aunque conozca el camino,
porque hay días tan oscurOs como la noche,
y noches que brillan más que un día,
porque hay días para todo,
porque todo a veces es nada...
y porque otras veces nada es todO…

Quizá porque… hay quienes te tienen delante y no te ven,
y quienes te han visto sin mirarte,
porque puedo verte cuando no te miro,
y no mirarte cuando te veo…

Quizá porque… el mismo abrazo que adoro, me ahoga…
porque aunque me ahoga, me atrapa…
Quizá porque… no siempre correr significa llegar más lejos,
porque lo más peQueño en ocasiones es lo más grande,
porque lo más ligero a veces es lo que más pesa.
Porque en ocasiones uno se salta sus propias reglas…
para después poder cumplirlas,
porque a veCes… aunQue se pierda se gana…
y porque… hay victorias, que en realidad son derrotas…

Queda prohibido...


Queda prohibido llorar sin aprender,
levantarse un día sin saber que hacer,
tener miedo a tus recuerdos.

Queda prohibido no sonreír a los problemas,
no luchar por lo que quieres,
abandonarlo todo por miedo,
no convertir en realidad tus sueños.

Queda prohibido no demostrar tu amor,
hacer que alguien pague tus dudas y mal humor,
queda prohibido dejar a tus amigos,
no intentar comprender lo que vivieron juntos,
llamarles solo cuando los necesitas.

Queda prohibido no ser tú ante la gente,
fingir ante las personas que no te importan,
hacerte el gracioso para que te recuerden,
olvidar a toda la gente que te quiere.

Queda prihibido no hacer las cosas por tí mismo,
tener miedo a la vida y sus compromisos,
no vivir cada día como si fuera el último suspiro.

Queda prohibido echar a alguien de menos sin alegrarte,
olvidar sus ojos, su risa, todo,
porque sus caminos han dejado de abrazarse,
olvidar tu pasado y pagarlo con tu presente.

Queda prohibido no intentar comprentender a las personas,
pensar que sus vidas valen más que la tuya,
no saber que cada uno tiene su camino y su dicha.

Queda prohibido no crear tu historia,
dejar de dar las gracias por tu vida,
no tener un momento para la gente que te necesita,
no comprender que lo que la vida te da también te lo quita.

Queda prohibido no buscar tu felicidad,
no vivir tu vida con una actitud positiva,
no pensar en que podemos ser mejores,
no sentir que sin tí este mundo no sería igual.

PABLO NERUDA.-

Un destello de felicidad


El mundo es una pesadilla
y yo he sido tan feliz.
El mundo se derrumba y gira
pido disculpas por vivir.

Ya lo sé, no soy un héroe,
no soy el más valiente de los que te amaron,
no soy tu estrella
ni el tipo que disfruta tus pecados.
No pido excusas ni perdón
salvar tu vida o redención,
solo busco un trozo de verdad.
Un destello de felicidad.

Bebí del ron de la nostalgia,
dulce verano de diciembre.
Suena tu risa en el contestador,
dulce delirio adolescente.

Ya lo sé, no traigo nada
no traigo solución, no traigo paz.
Sueño con olas que empujen
nuestras vidas hasta el mar.
En un banco del parque hallé
la llave que cierra el edén
donde el tiempo riega tu rosal.
Un destello de felicidad.

Ya lo sé, no traigo nada,
solo una luz que me quema en el pecho.
Nunca has pensado en huir al sur
para empezar de nuevo,
perdido en San Telmo yo soñe
que te encontraba igual que ayer
iluminando mi ventanal.
Un destello de felicidad.

El mundo es una pesadilla
y yo he sido tan feliz.
El mundo se derrumba y gira
pido disculpas por vivir.

Soneto XVII


No te amo como si fueras rosa de sal, topacio
o flecha de claveles que propagan el fuego:
te amo como se aman ciertas cosas oscuras,
secretamente, entre la sombra y el alma.

Te amo como la planta que no florece y lleva
dentro de sí, escondida, la luz de aquellas flores,
y gracias a tu amor vive oscuro en mi cuerpo
el apretado aroma que ascendió de la tierra.

Te amo sin saber cómo, ni cuándo, ni de dónde,
te amo directamente sin problemas ni orgullo:
así te amo porque no sé amar de otra manera,

sino así de este modo en que no soy ni eres,
tan cerca que tu mano sobre mi pecho es mía,
tan cerca que se cierran tus ojos con mi sueño.



Pablo Neruda.-